El año que marcará un antes y un después en su larga historia.
El mítico festival, es de los pocos que consigue obtener fieles defensores como acérrimos rivales, adversarios que al final terminan hincando la rodilla, ante la evidencia, de que es un evento envolvente y que pase lo que pase, siempre vas a desear estar allí.
Este año, ya echábamos en falta los anuncios meteorológicos anunciando que no viajemos el lunes o martes previos al festival, esas señales de alarma, que no recordaba desde 2015. Es cierto que las exigencias de seguridad civil de Alemania, no son las mismas hoy en día, como lo fueron hace 8 años, pero al final, tanto revuelo y tanto ruido, cuando el peor Wacken, que recuerdo en estos 15 años de andadura sigue siendo en primer lugar aquel de 2015, que fue muy complicado con lluvias durante toda la jornada en días de conciertos.

Nervosa
Es cierto que algunas zonas, quedaron incontrolables para acampar u aparcar. Que llovió y mucho el domingo y lunes previó y la noche del martes al completo, pero al final las jornadas del viernes y sábado, fueron con cielo despejado, calor, y solo llovió la madrugada del domingo y alguna mañana del miércoles. Pero en resumen, se pudieron disfrutar los conciertos sin las inclemencias de una lluvia constante durante las actuaciones, y salvo el caos inicial, con cancelaciones, como sucedió con la Metal Battle y algunos escenarios principales, le resto de días fueron recobrando la tranquilidad y sus horarios.
Es una pena, eso es innegable, que la mitad o poco menos del aforo, se haya quedado sin entrar, que Wacken suspendiera el ingreso a coches y caravanas, tras largos kilómetros de espera. Muchos tuvieron que dejar sus coches en Itzehoe e intentar ingresar al festival, en autobuses públicos o caminando, incluso así, muchos no lo consiguieron.
Creo que al final esta jornada, va a marcar un antes y un después en el acceso al festival, limitar un aforo y mejorar con ello el disfrute del mismo. Aún así, Wacken, tras la pandemia y todo el mal que supuso a sus arcas y a la de muchos promotores, ellos no han sido la excepción. La pandemia hizo mucho daño, también a las empresas. Sus dos últimas ediciones han estado también marcadas por reajustes en ubicación de escenarios y demás puestos, la venta a un fondo de inversión americano, como parece ser, una de las causas, ha alterado también el bien devenir del evento, en asuntos que antes nunca, o casi nunca fallaban, el sonido, los horarios y el relativo buen acceso a los tres escenarios principales.
El sonido falló, al menos en tres eventos grandes que pudimos ser testigos, con Kreator, que desde el fondo en los puestos de comida, fuera del Infield, se escuchaba muy bajo, algo poco habitual. Wardruna en el ”Faster” se le fue el sonido y quedo en silencio y tenemos amigos, que escucharon a Iron Maiden desde el fondo, que nos comentaron que el sonido había dado fallos. Esto es fundamental y deme cuidarse con mimo y evitarse a toda costa estos problemas, porque, un buen sonido es un pilar en espectáculos de esta índole.

Megadeth
Y si a esto le sumamos, el traslado del mercadillo, al fondo cerca de las zonas de acampar, y otras tiendas interesantes para rebuscar un disco, un parche, una camiseta o un regalo para alguien especial, convierte al evento en un océano, complicado de navegar, más aún con las botas de lluvia y barro y como no, lo que esto afecta a los dueños de los mercados, que intentan sobrevivir con sus negocios. Mi compañera de viaje Rocío, hizo híncapie en un detalle, acerca de las entradas de papel, para los coleccionistas, que es cierto, no se han vuelto a ver, o al menos yo no las recuerdo desde hace años.
Desde 2022, en el regreso a la normalidad, se huelen cosas no muy positivas en el festival. Si es cierta la venta a un fondo de inversión americano o de UK, que esto termine siendo un evento puramente económico, con el fin de ganar la mayor cantidad de dinero, en detrimento de los fans, los auténticos cabezas de cartel de cualquier evento. Los precios de las camisetas, han subido bastante, los diseños de este año, dejaron mucho que desear en comparación a ediciones anteriores.
Es cierto que los cambios, son necesarios e incluso natural en todo proceso empresarial y humano, solo que deseamos que este sea para mejorar las condiciones de los asistentes y no ver en ellos, simplemente un medio para enriquecerse, y declinando con ello en la calidad del espectáculo. Como citaba al inicio, las cosas pasan por algo y este caos surgido a raíz de la lluvia, puede que marque al evento en mejoras del acceso y se replantee el orden de los escenarios y los mercadillos.

Helloween
Nuestra jornada inició tras salir de Hamburgo el martes al medio día, tras dos hermosos días de turismo en la ciudad y el llamado barrio rojo, Sant Pauli, con lluvia fuerte todo el lunes. El martes de camino a Wacken, nos cayó la de Dios, pero curiosamente, al llegar a pocos kilómetros del evento, el tiempo cambió por completo, siendo este soleado. El acceso se hizo, por una zona poco común de acceso, ya que la calle del pueblo estaba cerrada por seguridad habitual de los metalheads. Aún así tras la larga vuelta dada por nuestro enigmático chofer, enfadado o cansado, eso no lo sabremos, conseguimos llegar a la estación de buses principal, justo 2 horas después de salir de Hamburgo, con lo cual, teníamos tiempo suficiente para realizar nuestras acreditaciones, en el lejano sitio dispuesto para ello y como no plantar nuestra tienda en la casa de mi familia. Todo esto mientras la climatología acompañaba, por lo que había que aprovecharlo al máximo. Una vez instalados, con brazalete de prensa, comidos y bebidos, por la noche volvió a caer la de Moises, pero para entonces, ya nos refugiamos en nuestra tienda.
Sin las responsabilidades previas de la Metal Batalla, y con fotógrafo acreditado para que se encargara de las mismas, nos tomamos el festival, más relajado en años y nos dispusimos a disfrutar del mismo con la buena compañía de mi compañera de profesión Rocío “Wacken” Gómez de www.redhardnheavy.com sin duda fue una experiencia inolvidable.
Miércoles:

Possessed
Tras ciertos desajustes en los horarios debido al clima, pudimos disfrutar, pese a los retrasos, de Battle Beast, una de las bandas ganadoras de la Metal Battle 2010 en Wacken y que más éxito ha tenido a nivel mundial. Los finlandeses, siempre cumplen con creces en sus actuaciones, gracias a la potente voz de Noora y los pegadizos riffs del resto de la banda que hacen las delicias en sus variados temas. Sin duda una de las mejores experiencias del escenario Louder y todo ello acompañado de buen tiempo.
Luego me dedique a explorar nuevas bandas, gracias a la recomendación de mi compañera Rocío, tales como; D`Artagnan en el escenario Wackinger, una banda de folk rock alemana muy llamativa liderada por Benjamin Metzner de Feuerschwanz. Una grata sorpresa descubrir bandas nuevas y divertidas, ya que me hizo disfrutar como nunca. Aún así tuvimos tiempo de degustar el directo de Doro y su 40 aniversario, todo un hecho relevante en su casa, en Wacken, y del que hemos tenido el honor de ser testigos.
La jornada inicio con cierto caos, por las noticias que venían de fuera, los cambios en los horarios y cierta incertidumbre, que todo esto genera, ya que era la primera vez que lo viviamos, pero al final, todo fue transcurriendo con normalidad y los que estábamos dentro, los que sabíamos lo que se cocía, conocíamos la verdad y esa fue que Wacken no para y su maquinaría andaría con fuerza, como de costumbre.
Jueves:

Hammerfall
Un día especial, con un cartel muy llamativo y cuya camiseta, apuntaba maneras, y dicho sea de paso, uno de los mejores artes de este año. Bandas como Helloween, que dieron un concierto de la hostia, no es de extrañar, con la formación que poseen. No me quiero imaginar cuando editen un disco nuevo estos titanes, que han tenido la grata idea de reunirse y dejar sus rencillas de juventud a un lado. Vixen, era una banda que me hacia ilusión ver, pero que sin su vocalista original, poco pude ofrecer hoy en día, más que retirarse con honor. Hammerfall, los suecos, hicieron un directo especial de lo 20 años de su álbum “Crimson Thunder” y este tipo de shows, son siempre muy bien recibidos, porque dan la oportunidad de disfrutar al completo de discos clásicos que nos dejaron huella. Deicide hizo lo mismo con su “Legion”.
Pero si hubo dos bandas que me marcaron profundamente fueron sin duda los también suecos de Inminence, en su primera actuación en Wacken y que dejaron una más que grata actuación, con un directo potente, dentro de su peculiar manera de entender el metalcore, con su violín y llamativa voz, que igual te deja perplejo con sus voces limpias que te tumba al suelo con sus registros viscerales y más potentes. Sorprendió a un público expectante, alguno ya conocíamos su potencial, pero igual, verles en este tipo de escenarios, como les engrandece y si además es su debut en la meca del metal, pues imaginaros el brutal show que se marcaron estos chavales. Brutales y nos dejaron una grata sensación en el paladar.

Imminence
La segunda banda que me dejaría una buna carta de presentación fueron Faun en el Wackinger, otra grata sorpresa y que nos hizo vibrar como nunca. Su Folk rock medieval, debe ser visto en escenarios como este para comprenderles mejor, y son sin duda el mejor escaparate para este tipo de bandas. No en vano, las sensaciones en este escenario erán como regresar al pasado y con la lluvia estar viviendo un Wacken old school, mientras que en los escenarios principales se vivía el nuevo Wacken, ese que aún no sabemos hacia donde nos llevará, ya que sus fallos de sonido los últimos años, deja mucho que desear, pero aún somos necios y creemos que algo bueno saldrá de toda esta vorágine de cambios y reestructuraciones a nivel interno. Pero vamos a lo meramente musical, Faun, son de esas bandas y en estos sitios, que de verdad te hacen sentir en la época medieval y que te hielan la piel porque solo en estos lares, entienden este género como pocos. Sin duda la mejor manera de cerrar la jornada especial para recordar.
Viernes:
El viernes todas las miradas y expectativas se dirigían hacia Iron Maiden, bien porque les conocemos y sabemos que nunca defraudan o bien porque les vimos en esta gira con anterioridad en otro gran escenario, como el Hellfest y ya sabíamos lo que se nos venía encima. Pero dejemos a los británicos para más adelante. Iniciamos con Amaranthe, una banda que se me había escapado en varias ocasiones, en sendos festivales y actuaciones en Madrid, y no sería dejar pasar esta ocasión en el mejor escenario de todos, para disfrutarles y vaya que lo hice. Tocaron temprano, pero eso no es excusa para ver a uno de los mejores exponentes del heavy metal sueco. Sus tres vocalistas y su original estilo liderado por la hermosa Elize hicieron las delicias d los pocos que madrugaron ese día y se llevaron un directo para recordar. Su nuevo disco “Manifest” y sus clásicos sonaron increíbles y nos cargaron las pilas para una jornada que se esperaba extenuante.

Iron Maiden
Lo mejor era el sol y el calor que nos acogía esa jornada. El viernes y el sábado hizo buen tiempo durante todas las actuaciones, lloviendo solo por las mañanas y el domingo ya de madrugada, por lo que el suelo estaba seco, y el barro, ya no era un enemigo más a combatir. Las botas seguían siendo necesarias pero se sentía un mejor ambiente en los escenarios. Además no olvidemos que la mitad del aforo no pudo ingresar, por lo que quieras o no, suene mal o no, lo disfrutamos bastante los que estábamos dentro, ya que no sufrimos el agobio de los otros 45.000 asistentes. Es la realidad, guste más o menos.
Megadeth sonó increíble, y tuvimos la suerte de degustar a su guitarrista fetiche Marty Friedman en varios temas clásicos, lo que fue sin duda una oportunidad única para ser testigos de ello. Yo me quedo con los alemanes Santiano, que me asombraron, y cómo bailé, como nunca lo había hecho en Wacken; qué banda más buena, y como se le aprecia en Wacken, claro, juega en casa. Pero es que sus temas, son alucinantes y te hacen mover y crear una vibración tan positiva, que después de ellos, todo era alegría. Vamos después de Inminente, mi segunda banda que mejor sensación me ha dejado. Wardruna, tuvo problemas de sonido, y en ciertas partes no se escuchó del todo. Además creo que su estilo era más para un escenario pequeño como el Wackinger, creo que en el Faster, simplemente se perdió y no lo aprecie tan bien como hubiera decaído, ademas de que tras escuchar, ver y sentir a Iron Maiden, era normal que su estilo no conectará con nosotros, por mucho que la banda nos guste, pero la energía que nos dejó Iron Maiden, no daba espacio para nadie más.

Wardruna
De Iron Maiden qué os voy a contar yo ahora que no sepáis, Su nueva gira se basa en dos discos, en el “Somewhere in Time” de 1986 y el “Senjutsu” de 2021 y algún tema suelto. Y una oportunidad de degustar cortes que en anteriores giras no suelen sonar y como no promocionar su nueva obra, un disco, progresivo de altos calibres en donde la banda explora nuevos senderos y nos ha obsequiado con un disco sublime y que en directo gana enteros por lo espectacular de sus temas, sin duda solo para expertos y conocedores del buen metal y no en metal talibanes perdidos en que todo lo pasado fue mejor.
Además la banda cerraba la gira en el mejor escenario del mundo y eso se notó desde el inicio, vimos un Bruce exultante, más parlanchín y feliz ya de poder irse de vacaciones, unas muy merecidas dicho sea de paso. Su puesta en escena ha sido en toda la gira, menos exuberante y más centrada en los temas, por decir algo, más como en sus primeros años, y sin tanta parafernalia, de allí que esta gira, me ha dejado un muy buen sabor de boca, para aquellos que hemos visto a iron Maiden en etapas más recientes y no en los ochentas u noventas. Creo que ha sido muy acertado por parte de su equipo tirar por algo más “old school” por decirlo de alguna manera.
Poder verles en primera fila da para terminar la jornada con una sonrisa y saber que se ha sido testigo de otra noche para recordar. Debo admitir que me siento honrado de haber disfrutado de sus cuatro actuaciones en Wacken, cada una de ellas única y especial desde 2008, 2010, 2016 y este 2023. Iron Maiden son de esas bandas que no te cansas de ver y escuchar, y por mucho que no sonaron clásicos de siempre, casi mejor, para así degustar nuevos cortes y otros antiguos que no solían tocar. Sin duda una de las mejores experiencias de la jornada y del festival.
Sábado:

Jinjer
Esta jornada nos la tomamos con calma, para visitar el pueblo, verificar los cambios de ciertos locales y otros nuevos, como el Bar de Lemmy, cuya pintura, deja mucho que desear, vamos que el artista, no tenía ni idea, ya que no se parece en nada a Lemmy. Al lado abrieron también una tienda de mercadería oficial y al estar escondida, nos resultó genial, para evitarnos las largas colas y poder pillar nuestros recuerdos, sin agobios de gente.
Pudimos por fin disfrutar de nuestros amigos de Alien Rocking Explosion en el escenario Welcome To The Jungle, una banda que ha tocado en los cinco últimos años y nos llena de orgullo que sigan contando con ellos, para representar a nuestra escena española. Más tarde vimos un rato a Voivod, una banda complicada de asimilar por mi, incluso con todos los años que lleva y cerramos una jornada, con amigos y aprovechamos para repasar buenas vibras en el pueblo en el Metal Place, un lugar encantador que te llena de energía. Os invitamos a dedicarle unas horas en futuras visitas al festival.
Resumen:
Insisto, que lo acontecido, marcara un antes y un después en el acceso de público y la forma en que lo deseen hacer. Las medidas de seguridad, siempre son bienvenidas, pero al final, fue más bien, mucho ruido y pocas nueces, ya que disfrutamos de un festival, prácticamente de manera tranquila, salvo el pequeño caos al inicio, pero con un buen par de botas y un chubasquero, nada pude (pudo? – puede???) impedirnos de que lo pasemos bien en “the Holy Ground” de Wacken.

Possessed
Hay cosas que mejorar, eso es evidente, el orden de ciertos espacios, y como no el sonido en los principales. Esperemos que los nuevos inversores, apuesten por los que de verdad hacemos Wacken grande, y esos somos su fiel público y nos vean solo como una fuente para sacar dinero y ganancias. El festival, posee su particular encanto y sirve además de disfrutar las bandas, para pasar tiempo con buenos amigos, que solo nos reunimos en ese lugar. Que la experiencia y razón de ser del festival no se vea dañada solo por intereses económicos.
Todas las mejoras y porqué no cambios que ayuden a mejorar y a hacer mejor el evento, serán siempre bienvenidos. Recordemos que Thomas Jensen , comento una vez, que el verdadero cabeza de cartel del festival, es y será siempre Wacken. Pues que no lo dañen los fondos de inversión, que aunque sabemos que el dinero es importante para mover estos enormes y complejos negocios, no olvidemos por y para que nació este original y único evento. Por lo demás, la verdad disfrutamos de una de las mejores ediciones, y esto es a nivel personal. Y espero, ya no solo repetir, sino mejorarla año a año, empezando por un 2024 que ya deseo que llegue pronto.
Nos vemos pronto en Wacken, “Rain or Shine”. Acaso hay un lugar mejor donde ir en Agosto?, sí, muchos, pero como The Holy Ground, no.
Fotos: M – P