EL PANZER KADAVAR
La escena stoner de Argentina está en pleno grito de guerra, y Noiseground es uno de los principales exponentes del género. El jueves 24 de Septiembre del 2015 será difícil de olvidar para los que estuvimos en The Roxy Live, presenciando un nuevo triunfo del rock de buen gusto, culto y presente. El trio berlinense Kadavar llegaba por primera vez a Argentina, y, si bien se hicieron esperar un poco, ofrecieron un show superlativo tanto sonora como visualmente. Sauron y Poseidotica acompañaron a los alemanes en una noche fantástica.
Los encargados de arrancar la velada fueron los emblemáticos Sauron. La histórica banda de los hermanos Larralde es un plato fuerte para cualquier mesa. Desarrollaron un sonido demoledor, que parte desde los riffs de viola de JB Larralde y el sostén de la pared que forman el bajo de Zicarelli y la batería de Fazio, sumados a la voz hechicera del mítico Pato Larralde.
La banda oscila entre el heavy y el hardrock clásico con un estilo muy propio. Conformaron la lista de temas repasando su discografía y revivieron el clásico «Solo lo malo«, después de más de 10 años de no tocarlo en vivo. Temas como «Paisaje Final«, «Cruces» y «Conjuro» fueron puntos altos en un show de gran calibre.
Después de semejante entrada llegó el turno de Poseidotica, quien deleitó con su coctelera luminosa de sonidos del más allá. El cuarteto instrumental psicodélico es experto el volar mentes. Son 4 pintores de la música forjando una anarquía sonora simétrica y voluminosa. Las guitarras de Miceli y Rua se complementan de forma magistral, el bajo de Martín Rodriguez sostiene y dibuja constantemente, y el ex Natas, Walter Broide, despliega un ritual único en su batería. Su reciente albúm «El Dilema del Orígen» fue el principal protagonista de la lista, sumando algunos clásicos como «Hidrofobia» y «Elevación«, desplegaron un show muy intenso y atrapante.
Con el Roxy completamente colmado y haciéndose esperar, los alemanes Kadavar aterrizaron en el escenario, literalmente y con impacto detonador. El despliegue de tal explosión agito al público de gran forma. Estamos hablando de un «bandon» con todas las letras. Diferentes. El stoner del «Dragon» Bouteloup en el bajo, se mezcla al hardrock marca 70s de la guitarra de Lindermann de manera asombrosa, una formula única que combina los dos estilos con un sello muy propio. Al baterista le dicen Tigre, lo es. La garra y actitud de este vikingo son grandes como montaña. El tipo se carga el equipo al hombro, ¡Y qué equipo! Sonaron los clásicos de la banda: «The old man«, «All our thoughts«, «Black sun«, «Doomsday machine» y «Come back life» e Hicieron hincapié en «Berlin», su última placa, que los trajo a estos pagos. Una banda para ver en vivo, una fecha especial y de las mejores del año sin dudas. Noiseground lo hizo de nuevo.
Crónica por Nehuen Tronconi
Fotos: Ana Cerelli
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