El trío de Chicago volvía a estar de gira por Europa presentando su último trabajo, “Guidance”, y parar en la ciudad Condal era una visita obligada tanto para ellos como para sus seguidores. Posiblemente es una de las bandas que más ha visitado la ciudad y para esta ocasión, que se celebrase en la sala Bikini era un auténtico acierto debido a su excelente acústica.
Pero antes de todo, quienes se encargaron de abrir esta velada fue la banda CLOAKROOM. El también trío americano ofrecería un buen show de rock alternativo. Su objetivo era alimentar nuestros oídos ya que se encontraban tocando en una auténtica penumbra, con apenas una iluminación tenue y en contraluz. Pero cumplir sus expectativas lo hicieron, y en gran escala, ya que su música nos atrapó a todos con sus riffs calmados, aunque distorsionados y la voz de Doyle Martin que nos transmitían calma.
Sin lugar a duda, la banda de Indiana recibió una gran ovación por parte de todo el público que había por el momento en la sala Bikini, que no era poco. Se nota que este tipo de música atrae a las masas últimamente.
Con las primeras notas de “Asa”, de su último trabajo, empezaban RUSSIAN CIRCLES su show. Más visibles que la banda telonera, el trío de Chicago empezó a descargar toda su adrenalina para compartir su música ante una sala Bikini muy animada. La gente disfrutaba de su música y no es para menos porque el espectáculo que ofrecieron era demasiado potente, musicalmente hablando.
Es impresionante como con tan solo tres personas pueden realizar un sonido tan potente como consiguen otras bandas con más integrantes. Los tres funcionan a la perfección creando una única alma, una deidad musical. Además de poder escuchar temas de su último trabajo en directo, era de esperar poder disfrutar de obras de antaño como “309”, “Deficit”, “Mlàdek” o “Youngblood”, tema que escogieron para despedirse del público barcelonés.
Sin lugar a duda la velada ofrecida por estas dos bandas ha sido de medalla de oro. Un auténtico espectáculo musical que gozó un gran número de personas que asistieron a la sala Bikini de Barcelona. Las visitas de RUSSIAN CIRCLES no defraudan nunca y eso se suele demostrar cuando se ven ambientes así en las salas entre semana.
Texto y Fotos: Marc Laplana
