MAESTRÍA A LAS CUERDAS
Los mexicanos RODRIGO Y GABRIELA volvían a Barcelona después de unos cuantos años para ofrecernos su último trabajo discográfico en vivo. Este dúo de guitarristas tuvieron su reconocimiento internacional al tener uno de sus temas dentro de la banda sonora de una de las series más queridas y aclamadas de la televisión como lo fue, y sigue siendo, Breaking Bad. Así que era muy probable que la sala grande de Razzmatazz se acercase un número alto de gente para disfrutar de sus melodías y ritmos a las seis cuerdas.
Previamente seríamos ligados al folk irlandés gracias a la joven banda KINSALE. La joven formación acústica catalana demostraba su repertorio musical en base de las melodías de la isla verde pudiendo sentir en nuestros oídos unos ciertos matices de la música de allí, como a THE CRANBERRIES, por poner un ejemplo. Y es que para más inri, el nombre de la banda procede a una bella localidad de allí.
La sala se encontraba atenta, concentrada ante las canciones que interpretaban Irene y Raquel tanto sus própias de su reciente EP como diferentes versiones que tienen en su repertorio. Todo un gran descubrimiento este duo musical en el que mezclan su dulzura vocal con melodías melodías y pausadas que crea que se te erice el vello como grandes momentos de rock y energía. Y es que el trabajo que realiza ambas integrantes de la banda hace que se cree un sonido único y diferente que hace que el público quede hipnotizado ante ellas.
Mientras se esperaba ansiosamente a la banda mexicana uno podía reflexionar el ambiente que te puedes encontrar en los conciertos dependiendo del tipo de música que asistas. Es curioso como en algunos shows te topas como si estuvieses en plena calle ya que te los encuentras hablando durante toda la velada. Y es que no es nada negativo pero en ocasiones te puedes topar con que dificultas a otro grupo de asistentes que prestan atención. Y esta sensación te la encontrabas durante el concierto de RODRIGO Y GABRIELA. Siendo únicamente dos integrantes en la banda, y tan solo dos guitarras, te encuentras que es difícil poder prestar la atención que uno desea debido a lo que te envuelve.
La sala se fue llenando más y el espectáculo que ofrecían al fondo era toda una delicia visual. Cada guitarrista tenía una cámara en sus mástiles y los técnicos realizaban una pequeña mezcla visual como telón de fondo, pudiendo ver en gran pantalla la rapidez y técnica que tienen los mexicanos. Ofrecieron temas suyos, nos deleitaron con un medley de heavy metal, género musical que ambos comparten, tocando fragmentos de bandas como MEGADETH o METALLICA.
Los mexicanos estuvieron en todo momento conectados con el público el cual fueron invitados por la banda a subirse con ellos a bailar en el escenario durante unos temas. Se lleno de jóvenes que no perdieron ni un momento en darlo todo arriba de la tarima además de poder hacerse alguna foto con sus músicos preferidos. La comunicación se iba intercambiando entre los integrantes que interactuaban manteniendo una conversación explicando sus orígenes, su presente y su previsión de futuro durante el próximo año.
Momento culminante cuando empezaron a sonar las primeras notas de “Tamacun” provocando el estallido del público en la sala Razzmatazz. Su canción más reconocida gracias al reconocimiento que comentábamos a primeras líneas provocó que la gente estallase a bailar en toda la sala y pidiendo más temas para continuar la noche. Pero no pudo ser, tras este tema el dúo mexicano se despedía en el escenario de sus asistentes y agradeciendo la noche acústica vivida en la ciudad de Barcelona.
