DARKHAUS "When Sparks Ignite" Oblivion / SPV

Un trabajo llamativo producto de la reunión de un grupo de amigos, entre ellos algunos famosos como; Ruper Keplinger, guitarra de EISBRECHER y Gary Meskil y Marshall Stephens de PRO-PAIN. Y nos presentan lo que ellos y su compañía nos presentan como Modern / Dark Rock, algo que compartimos desde Rock In Spain, incluso añadiría que las sensaciones han sido de escuchar temas con un cargado sentir comercial. Es cierto que la presencia de refinados riffs y melodías pasionales, todo dentro de un ambiente de Rock, le privan de definirlo como Pop, pero es un proyecto bastante “light” y comercial que a ratos hace complicada su escucha por ese particular sentir. Pero para colores gustos.

Hay cortes que se te quedan con mayor ahínco, como me sucedió con; “The Last Goodbye”, con un preciso y acertado riff y cierta rebeldía en sus melodías que enganchan. Muy apreciadas sus atmósferas, que no solo en este tema consiguen atraer al oyente, sino que las encontramos a lo largo de todo el trabajo, con distintos tonos y colores para satisfacer los distintos apetitos, en esta en concreto, no resuelve con un corte un poco más fiero y un agradable solo que animado por una batería constante y cambios pegadizos, nos dan como resultado un tema sólido y de los mejores para mí del disco.

“After The Heartache” posee una acertada rítmica con mucho peso pero que luego decae en una línea más comercial y nos deja con cierta incertidumbre, sobre qué hubiera pasado si hubiera continuado los pesados riffs del inicio. Aun así el tema es animado. “Devil´s Pawn” es el segundo corte que más me gusto, de nuevo con atmósferas variadas y en esta ocasión con un inicio demasiado lento, luego el corte coge carrerilla y peso, dando como resultado una canción pesada, con unos deliciosos riffs de fondo. Y cierro con “To Live Again”, otro tema con el que aciertan, firme y constante y con más peso en sus instrumentos.

Son doce cortes variados dentro de la perspectiva que citamos al inicio, un Modern / Dark Rock, pero con la dinámica de un sabor demasiado comercial y carne propicia para parrillas de radio, que terminan agotando la paciencia del más erudito en escucha de estilos.

Un trabajo que no pasa de ser el proyecto de figuras de otras bandas y que aporta poco o nada al mundo del Rock, salvo una o tres canciones pegadizas, de esas que siempre se te quedan, porque malos no son los músicos, solo que el producto final aburre bastante.