Tan sorpresiva es la innovación de lo establecido como lo es su continuación. SEXMA vuelve a presentar batalla, con los instrumentos mejor afilados que nunca, con su segunda obra de larga duración: Hexánime. Impactante, pegadizo y todo un precedente para el metal alternativo nacional.
¡Siguiente andanada! Siempre es difícil reseñar un disco cuando éste te sorprende en mayor o menor medida así que, ¿Por qué no tirar un poco de la cultura tan olvidada hoy en día y jugar un poco con el lenguaje para hacer comprender la primera impresión que este disco supone? Estamos ante diez cañonazos, diez estocadas, que, sin duda, dejan tocado al enemigo. Tocado pero más vivo que nunca. El enemigo, corsario de cualquier nación y a la vez simpatizante de la nuestra, se opone armado de todo tipo de prejuicios y demás malas jugadas de la memoria. ¿El resultado? Un disco impactante, no en su creatividad, sino en su concepto e idea, que, lejos de crearnos rechazo, nos hace tener ganas de más y más. ¿El resultado? Hexanime.
Ahora bien, no nos volvamos locos y es que es necesaria la respuesta a, ¿Qué tipo de impacto propone el disco? Ciertamente, es difícil de definir. Si entramos a evaluar el sonido general del disco, es evidente que cualquier persona relativa a la música te susurraría el temido nombre, para las jóvenes bandas, de “Sôber”. Temido en cuanto a, que, para ciertas personas, es difícil la superación de la existencia única y monopolio exclusivo de géneros musicales por uno o dos grupos siendo imposible diferenciar una referencia de la creatividad propia. ¿Qué fue primero? ¿El huevo o la gallina? Sinceramente, yo creo que el talento musical. Lógicamente, dejamos aparte bandas que carezcan de él.
SEXMA y HEXANIME
Puestos en materia vayamos por el trabajo que hoy nos ocupa: Hexánime, el cual gana enteros con cada escucha. Quizás la expresión correcta sería esta: Hexanime se hace entero con cada escucha. Va resultando un álbum sólido y con bastante personalidad. Si bien es cierto que adolece en algunos momentos de una letra un tanto tópica mas el sentimiento final de cada letra queda reflejado sin problemas. Musicalmente, es inevitable no acordarse de ciertos grupos nada más empezar a escuchar el álbum pero a medida que vamos viajando por los diferentes cortes nos damos cuenta de que tienen algo diferente. Quizás una mayor dosis de Hard Rock, quizás un toque que con el tiempo podremos definir como el toque “Sexma”. Destacamos canciones como “Leitmotiv” (que abre el disco de manera más que acertada), “Inflamable”, “En pie” (que cuenta con la colaboración de Carlos Escobedo, Sôber), y mi favorita: “Nada que ofrecer”, la más hard rockera del disco y quizás la más melódica.
En resumen, “Hexánime” no abre ninguna puerta hacia nuevos parajes o llanuras repletas de géneros por descubrir pero rinde. Atraviesa la puerta que muchos otros han atravesado, pero lo hacen desde su punto de vista y con un toque personal que se va desarrollando a través del disco. Solo falta esperar para ver como se desarrolla este toque personal y si acaba convirtiéndose en un sonido propio y personal o todo esto se queda en un grupo que será victima de nuestros prejuicios al “recordarnos a”. Personalmente, yo apostaría que van por el camino correcto para lograrlo. Grupo recomendado por un más que posible buen directo.