Crítica Hamlet - Berlín | Maldito Records

Crítica Hamlet – Berlín | Maldito Records. Hablábamos hace unos días en esta interesantísima entrevista con Luis Tárraga, y nos comentaba el arduo trabajo hecho en el estudio para este “Berlín”. Y ese trabajo ha dado su merecido, ya que los madrileños lo han vuelto a hacer. Si «Inferno» o «Syberia» fueron en su momento puestos en duda, y ahora son álbumes fetiche de muchos fans, con «Berlín» de primeras han conseguido unificar las críticas acerca de uno de los mejores álbumes de toda su discografía.

Han repetido grabación en los Sadman Studios de Madrid junto a Carlos Santos (Somas Cure, Toundra, Wormed, Adrift, Vita Imana…), mientras que para la mezcla y máster han acudido a Will Putney. Con esto, han conseguido mantener todo el nivel de crudeza y fortaleza del sonido Hamlet, pero añadiendo una buena dosis ambiental, teniendo pasajes las canciones que invitan al reposo,al invierno, al blanco y negro. De ahí la estética del artwork y la portada.

Pese a hablar de pasajes melancólicos, no es éste un disco blando, todo lo contrario. Encontramos algunas de las canciones más salvajes del grupo, como «Héroe» o «Salvaje«, que son impactos directos en toda la cara. Pero luego te encuentras canciones como «Eclipse» donde Molly, inmenso durante todo el disco, se dobla a sí mismo en el estribillo para ofrecer una línea desgarradora por debajo de la voz melódica principal, pudiendo escuchar la canción desde los dos puntos de vista. Un recurso más acuciado también en «Tu Destino» donde de nuevo se alterna las voces limpias con una base rítmica impactante, y los riffs de Luis y Ken , más furiosos que nunca, a todo tren.

Un tema que podría servir para resumir todo lo que es este nuevo disco, es sin duda «No Sé Decir Adiós«. Una canción, que pudimos escuchar en formato acústico y que sonaba totalmente emotiva, aquí nos trae algunas de las señas de identidad del grupo más reconocibles, como son ese inicio de bajo tan característico, y una canción que va in crescendo hasta llegar a la brutalidad del estribillo, pegadizo y rabioso a partes iguales.

En «Berlín» tenemos cosas de «Insomnio», de «La Ira», de «Syberia» y del álbum negro. Y tenemos cosas que nunca nos habían ofrecido. En definitiva, tenemos un nuevo disco de Hamlet que hará las delicias de todos sus seguidores. Y los que no lo son, y quieran acercarse a él, no se arrepentirán…