Muy a mi pesar y al de la mayoría de los asistentes el festival abre sus puertas por última vez en esta enorme edición. Crónica tercer y último día del festardor 2022. Sea cual sea el festival siempre sucede lo mismo. El primer día con todo el cartel por delante estás dispuesto a darte el atracón de buena música y cuando te das cuenta de que se acaba el menú sigues teniendo hambre de más.
De esa guisa entramos en el recinto. Ávido de agotar el cartel hasta el final porque la propuesta del sábado era muy suculenta y atractiva. Grandes nombres y una de las bandas más queridas del panorama español volvería a los escenarios tras un tiempo de para en “prime time”.
Sin ganas de perder tiempo bien temprano ya estaba en el recinto, bebida en mano para la propuesta más rocanrollera del cartel con tintes de hardrock clásico, visto como añejo por la multitud joven que aun pensaba si entrar o no en la zona de acampada.
A CICLONAUTAS me refiero. El trío hispano-argentino virtuosos del rock añejo con dejes de stoner y tintes de rock argentino como pudiera ser La Renga. A las 18:15, a la hora de los clásicos en el festival ya que El Drogas empezó a la misma hora, saltaron Mai, Txo vestidos con camisas oscuras y sobrecamisas propias del estilo. Virtuosos ambos con las guitarras capaces de cargarse el concierto a las espaldas únicamente con las 6 cuerdas.
Con ellas y con una potente batería versaron su concierto, a base de riffs pesados e intensos acompañados por un la potente batería de Alén. La pena era la escasa afluencia de público ya que, aunque el cielo ya lucía azul, acababa de llover con cierta intensad y sembró dudas sobre si asistir. Pena porque lo que se merecían recibir en forma de ovación del público no se lo pudieron llevar. Lástima porque se lo merecieron.
Tiempo de ponerse la camisa más reivindicativa, bronca, protestona de KOP. Años hacía que no los veía y gratamente me sorprendió con que fuerza y forma arrollaron a los que se acercaban a verlos ya ser porque fuese la primera vez. Recuerdos de instituto cuando actuábamos contra lo que creíamos incorrecto en las calles donde cada noche podía ser de reyerta.
Los catalanes guardan en su discografía verdaderos himnos de lucha callejera antifascista, de tendencia descaradamente izquierdista como hermandad, igualdad, liberación de los pueblos y de colisión frontal contra el fascismo y la corrupción de las élites.
Concierto mayúsculo como su nombre tema tas trema y pogo tras pogo y la potente voz de JuanRa que engarzaba tema tras tema solo con la pausas justas para lanzar proclamas hacia la protesta de todo lo que sucede y nadie debe ser ajeno.
La justa coincidencia del 9 d’Octubre, día del País València fue la tarjeta de invitación para salir a las calles a luchar contra el color del futuro incierto tras las siguiente elecciones autonómicas. En la misma línea de protesta y diametralmente opuesto a la ideología se encuentra el partido de extrema derecha que tiene cabida en el parlamento, una foto de su líder fue quemada para el gozo de los asistentes de ideas compartidas.
Los cortes que interpretaros aquellos más movidos, sin baladas ni tapujos como “Freedom”, “Desalojos son disturbios”, una de mis favoritas “Acció Directa”, “Ciutat Morta” la gigante “Antinazis”. Sobre excitados y con ganas de patear se despidieron mientras ahora ya caía la noche.
Pero no podíamos pestañear mucho porque el ritmo ya no podía decaer si no sólo podía ir a más ya que en pocos minutos después y se encendían las luces del escenario contiguo para albergar a nada más y nada menos que a lo reyes del punk desenfrenado y desvergonzado con letras con sorna capaces de reírse y hace befa de temas tan candente como ETA y la lucha armada del pueblo vasco.
Sí. LENDAKARIS MUERTOS son los únicos capaces de esto sobre una base de punk clásico, tralla, velocidad y espectáculo sobre el escenario. Aitor siempre con la séptima marcha puesta corriendo de punta a punta del escenario o incluso al escenario que estaban preparando para el siguiente concierto para saludar al ahora sí numeroso público que en esa zona presenciaba el concierto por las pantallas.
Muy juguetones con el público de las primeras filas incluso bajando a saludar y animar a los pogos. Los temas que parecen broma pero que la esencia es críticas esos acontecimientos de las épocas más oscuras del País Vasco de igual forma que banalizan con las drogas, prostitución o alcohol de una forma muy inteligente.
Todos los temas se cantaron como clásicos y normal, ¿Quién no ha escuchado alguna vez “Oso Panda” o “Eta deja alguna discoteca”? Si a estas les sumamos otras como “El 4K se llevó a mi chica”, “Chunga la húngara” o “Veteranos de la kale borroka” pues nada puede salir diferente a lo previsto, bailes, cantos, vasos volando y un oso pando en el escenario saltando y bailando.
Hora de la pausa para recargar que han sido más de tres horas de ejercicios aérobicos a ritmos frenéticos. Las opciones ambas desconocidas y mientras intentaba buscar un poco de relajo, ISEO&DODOSOUND empezaban su concierto.
Me gustó la propuesta sobre todo por el flow que desprendían. Ritmos resultantes de una inusual mezcla de reggae y dub muy envolventes con un tempo lento acompañado por la sensual voz y movimientos de Iseo. Para completar el dúo, adjunto un cuarteto de músicos capaces de conectar y comunicar de una forma diferente. Bonita atmósfera.
Aunque tras los últimos conciertos quería más y sólo esperaba que saltasen al escenario los de Getafe. Y es que SKA-P era uno de los nombres pesantes del festival y por ello les fue reservado el sábado, día de más afluencia de público y las 22:50 la hora donde todo el mundo ha entrado el recinto y ya ha ingerido suficiente alcohol como para dar todo y un poquito más.
La actitud de la gente con las energías alta como una olla a presión ya explotaron en breve ya que los primeros clásicos no tardaron en llegar como “Romero el Madero” o el “Gato López”.
Casi en cada canción el encargado de la trompeta, pero también el de animar empezó dejar de lado el instrumento y a disfrazarse para ir teatralizando algunos de los temas. Entre sus mejores galas, la de torero para “Abolición”, la de rey emérito con un maletín lleno de dinero con bandera de suiza para “Jaque al Rey” o de payaso de McDonalds.
También era el porteador de las banderas tricolor por los derechos de las diferentes formas de entender las relaciones amorosas en el tema “Colores” o la palestina para apoyar una “Intifada” ante el opresor. Se sucedían además temas como “Niño soldado”, ”Casposos” y la archiconocida “Cannabis” o la que todo el mundo esperaba.
“El Vals del Obrero” una de las canciones más conocidas dentro del género en todos los tiempos que seguramente un porcentaje muy alto ha cantado e incluso bailado alguna vez. Locura y euforia desatada y a parte alargada más de lo normal para la ocasión… Insistimos… y todo aquello continúo. Nadie se quería marchas. Queríamos más SKA-P ¡Queríamos más bailes más ritmo más fiesta más de todo!
Al final, se acabó. Saludos, agradecimientos en ambos sentidos. Nosotros por la descomunal fiesta propia de un festival y ellos por haber recibido tanta energía desde la parte baja que no hacía más que empujar y empujar para el poner el contador de revoluciones en la parte roja.
Pero el punk rock no paraba porque los asturiano DESAKATO ya estaban ajustando sus instrumentos para el que sería otro delirante y furibundo concierto de punk rock. Me encanta su propuesta con la compenetración de los dos vocales para introducirnos en asuntos generales de nuestro día a día como la sociedad de consumo o diferentes tipos de odio sin sentido.
Primer tema y el recinto del Puerto de Sagunto ya retumbaba a ritmo de “Volcán” y “Heridas Abiertas”. Pero las sucesivas fueron igual de bien recibidas pero las revoluciones volvían a estar altas sobre todo en temas como “Octubre Rojo” que inmensidad de tema, opulencia musical. Siempre cuidando cada uno de los detalles, los seis componentes trabajan los temas con mimo y con esa calidad salen conciertos redondos.
La incontinencia era latente en el público y también en el escenario tanto que Pablo no se lo pensó ni un momento para saltar al publico a saludar y a terminar crow-surfenado. De esa forma tan insana fue el final y fiel resumen del concierto.
Y tras tantas emociones y más de ocho horas de conciertos, bailes, empujones, cantos y cervezas y la vista del cartel dejé de lado los siguientes y decidí retirar calmadamente reflexionando e intentando ordenar tanto estímulo recibido para apaciguarme y bajar las pulsaciones que estaban al borde de ingreso médico. Y hasta aquí el Festardor 2022. Esperando ya la edición del 2023.